El Abrigo del Mas de Aspra y pinturas rupestres inéditas.

En el número del año 1992 de la revista de arqueología Bolskan del Instituto de Estudios Altoaragoneses, se da noticia de las pinturas del abrigo del Mas de Aspra, en el término municipal de Benabarre.
Descubiertas desde cuarenta años atrás por Ramón Roy, propietario del Mas y vecino de la localidad, y habiendo pasado 19 años desde la reseña que hacen de éllas Pilar Utrilla y Nuria Ramón, me ha interesado ver su estado actual.
Ramón Roy hijo, ha tenido la enorme gentileza de indicarme su ubicación, junto a otras curiosidades del Mas.
El último tramo de camino está cerrado por una cadena y hay que acceder a pie, cosa que no debe extrañarnos a la vista del saqueo actual de las explotaciones agrícolas y ganaderas.
Como en otros masos abandonados, su estructura se aprovecha para el pastoreo y la producción de miel.

Situado sobre un altozano rocoso, lo vemos aquí desde un campo cercano al sur del mismo.

Junto a la caseta de adobe que se ve en primer término, podemos ver un horno de regulares dimensiones.

Como me indica Ramón, junto al Mas se encuentra uno de los hornos de cal más bien conservados que yo haya visto, por sus dimensiones puede igualarse a los de Baells, sin embargo los supera ampliamente en su técnica constructiva, de una solidez indiscutible.
Exteriormente presenta éste pequeño túmulo que alberga su chimenea.

Por aquí vemos su boca y su zócalo.

Y ésta es su parte frontal por la que podemos entrar de pie.

Junto al mas se halla este pilaret dedicado a San Ramón.(¡Increible! está la imagen).

El Mas tiene una rústica belleza y hermosas vistas.

Una mirada atenta por las paredes del mismo, nos revela éste pedazo de muro construído en Opus Spicatum.

Ya desplazados hasta el abrigo tenemos ésta vista desde su acceso, puede entreverse su techo entre la vegetación.

Plano general del abrigo.

Y aquí vemos las pinturas, que fueron agredidas a fondo en 1976 como puede constatarse por la fecha grabada.
Gran parte de las fotos de ésta entrada, y por supuesto las de las pinturas, no son de la cámara del N82, sino de una Panasonic cuya resolución merecen.
A pesar de éllo, en su estado actual se muestran ténues, y las he recreado virtualmente con el editor de fotografía, a fin de darles cierta nitidez.

El primer elemento es éste cruziforme de negro más marcado que tanto podría ser un antropomorfo prehistórico como de época posterior.

Aquí se superponen dos personajes antropomorfos.

Y aquí éste curioso personaje, del que las arqueólogas citadas dicen, que si lo que ciñe es espada y puñal, situarían su datación en la Edad del Bronce y por el mismo motivo en cualquier momento posterior.
Sus brazos abiertos y sus grandes manos, parecen ser producto de una actitud de júbilo o alarde más que de oración, afirman.

A mi, como soy un romántico, me gusta la postura de éste hombrecillo, que parece aquel amigo que viene a recibirnos con los brazos abiertos para darnos un abrazo de bienvenida.



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Pinturas rupestres inéditas

Los dos grupos de digitaciones que verán a continuación son totalmente inéditos, pues los descubrió el que suscribe.
El primer grupo parece haber sido dibujado a partir de un círculo primitivo que fue rellenado después, el segundo es algo más difuso e impreciso.

La situación de los mismos no voy a darla de momento, aunque ya ha sido puesta en conocimiento del señor Joan Rovira, descubridor de las pinturas de las Cuevas del Salgar, y participante en el primer Congreso Internacional de Grabados Rupestres y Murales, (Lleida-1992).

Según me apunta, la cercanía de un poblado íbero sería tal vez el origen de las mismas.

Segundo grupo.

Ni que decir tengo que fue muy emocionante para mí su descubrimiento, me acordé del malogrado Lothar Bergmann, y de sus esfuerzos por preservar el arte más antiguo.
Y también me alegré de poder aportar éste pequeño granito de mi cosecha, fruto de no poco esfuerzo.